Una sesión de Rebirthing dura entre dos y dos horas y media. Hay una hora entera o mas de respiración tumbada en la cual se guía el ritmo de respiración de la persona hasta llevarla a una respiración fluida, libre y conectada con la energía.
La persona entra entonces en lo que llamamos ciclo de energía, en el cual deja partir tensiones y bloqueos y aprender a fluir y abrirse más a la vida.
Antes y después de la sesión de respiración, hay un compartir entre la renacedora y la persona sobre los temas mas importantes de su vida en este momento.
En cada sesión se enseñan y practican diferentes técnicas que son fáciles de aplicar en la vida cotidiana y que nos ayudan a superar limites y a conseguir nuestros objetivos.
Cualquier persona se puede beneficiar de las sesiones de Rebirthing, este en el punto que este de su vida. Hay personas que vienen por temas de crecimiento personal o espiritual, otras por temas de salud o de depresión.
Se suele trabajar con un ciclo de diez sesiones individuales. En este tiempo la mayoría de las personas llegan a lo que llamamos la liberación del aliento, es decir que desbloquean su mecanismo de respiración que normalmente suele ser muy inhibido, y aprenden técnicas que luego pueden aplicar en cualquier campo de su vida.
Después de 10 sesiones las personas acostumbran a desarrollar la capacidad de renacerse a ellas mismas cuando lo desean o lo necesitan.
“La respiración es el vehículo de la energía”.